Lamentamos la partida de un verdadero Scout.
Con nostalgia vemos como Don Max Doninelli Peralta se nos adelantó en la cuesta de la vida y planta su tienda en el valle del eterno campamento, a la diestra del Supremo.
Nos deja una huella indeleble en todos los actos de su vida, en los cuales dio clara vivencia del cumplimiento de la promesa.
En innumerables ocasiones gestionó acciones y desarrolló actos que emulan frases de nuestra esencia como Guías y Scout.
¿Cuántas veces promovió aquello de dar sin medida?, De ayudar a otros sin «esperar más recompensa que saber hago Tu santa voluntad».
Quizás nunca podremos citar la cantidad, pero en el corazón de muchos hermanos y hermanas vivirá el recuerdo de un Amigo que se adelantó en la escalada final.
Don Max, descansa con la sonrisa de la » Misión Cumplida».
Corte Nacional de Honor